Antes de que se decretara el estado de alarma por la pandemia del coronavirus, el sector de la moda española creció un 5,9% en valor en febrero, respecto al mismo mes de 2019. El mejor resultado de los últimos cuatro años.
Con la caída del consumo y con el consiguiente cierre de tiendas, no hay duda de que la crisis de la COVID-19 tendrá un impacto relevante en el sector de la moda.
Además, frente la situación actual, hay signos positivos que pueden contribuir a aliviar parcialmente los efectos del cierre obligatorio. Y es que este febrero el canal online creció un 36% en valor, un incremento por encima de la media anual (28%).
Un mes de febrero donde además del aumento de compradores, también se incrementó el ticket medio. Un incremento que se debió en parte al efecto calendario, ya que este año febrero contó con un día más y coincidió en sábado, día de la semana en el que mayoritariamente se concentran gran parte de las compras.
El calzado fue la categoría que más impulsó las ventas de moda en el segundo mes del año, con un crecimiento de casi el 10% en valor, en línea con la recuperación de 2019, después de tres años registrando importantes pérdidas durante los meses de febrero.
Con los esfuerzos de las compañías de moda focalizados en minimizar las consecuencias y adaptarse a la nueva situación, las próximas semanas y meses serán claves para ver la evolución del sector.