De acuerdo al estudio de KantarTrends and Prediction 2020, el auge de las plataformas podría saturar el mercado, convirtiendo a las personas en consumidores más exigentes y centrando su tiempo en los servicios con algoritmos que brinden la mejor experiencia.
En el 2019, la compañía Kantar predijo que la pantalla grande regresaría y tenían razón. Los datos de TV y medición de audiencia realizados por la consultora, confirmaron que el público está efectivamente volviendo a encender sus televisores para poder ver TV online. Esto ha significado un alza significativa en el consumo de plataformas de Streaming o VOD (Video onDemand), como Netflix, Amazon Prime, Hulu, HBO GO, entre otras, donde se pueden encontrar miles de series, películas, documentales y programas de TV.
A pesar de que la transmisión convencional aún domina el panorama televisivo, la visualización en línea continua ganando terreno en base a la suscripción de Video onDemand (SVOD), la cual tuvo un 2019 fuerte debido al aumento de competidores en un mercado donde Netflix lideraba con mucha ventaja, pero que de a poco ha ido cambiado con la entrada de grandes competidores como Disney, Apple yWarnerMedia.
Por otro lado, los canales de televisión también están intentando competir y han combinado fuerzas para desarrollar servicios de suscripción como el recientemente lanzado Britbox, creado por la cadena BBC Studios e ITV.
Esta mayor competencia puede parecer saludable, según datos del estudio de KantarMedia Trends & Predictions 2020 el 44% de los consumidores conectados que pagan por un servicio de transmisión en línea tienen al menos dos suscripciones, el 18% paga por al menos tres y el 7% paga por cuatro o más.
Pero esto da una señal que el mercado podría colocarse un tanto difícil para los nuevos servicios de transmisión por suscripción, ya que la atención de los consumidores y sus bolsillos tienen un límite, señala Sergio Jiménez, experto en Media deKantar Chile.
En ese sentido y de acuerdo a datos entregados por la consultora en el mismo estudio, señalan que el futuro de la televisión, incluyendo el vídeo y el streaming online, para este año y en adelante continuarán convergiendo cada vez más sobre los contenidos y sobre un servicio de gran calidad. Los consumidores continuarán usando tanto los métodos por suscripción como los financiados por la publicidad, pero la creciente oferta disponible terminará desembocando en una paradoja de elección. No siempre es cierto que “cuanto más, mejor”.
“Se debe poner atención ya que la entrada de tantos competidores podría saturar el mercado, produciendo que las personas se sientan abrumadas, convirtiéndose en consumidores más exigentes y centrando su tiempo en los servicios con algoritmos que brinden la mejor experiencia y disfrute” comenta Jiménez.
En el caso particular de los servicios financiados por suscripción, los ganadores serán aquellos con contenido original de la más alta calidad y comprensión de diferentes audiencias. Un ejemplo de esto es el trabajo que está realizando Netflix, probando velocidades de reproducción más rápidas, para que la gente pueda ver más contenido y darle un valor agregado a la plataforma, diferenciándose de sus competidores.
Mediciones de Audiencia
En esta cruzada por ser el N°1, las mediciones de audiencias de cada país pueden ser de gran ayuda, facilitando el comprender y dirigirse a los nuevos suscriptores. A su vez, la televisión tradicional seguirá siendo relevante para los consumidores y anunciantes siempre y cuando también utilice los datos de forma adecuada, e imitando las estrategias de éxitos mundiales como Love Island, de la británica ITV.
Este programa realizó un análisis de las preferencias y el comportamiento de los espectadores para ir ajustando la línea del programa, generando así el máximo valor y aumentando los beneficios de patrocinadores y anunciantes.
Las mediciones de estos nuevos tipos de contenidos conllevan a nuevos desafíos, y por ende a nuevas oportunidades estratégicas para los anunciantes, como la publicidad indirecta, la integración de marcas y las co-producciones. Pero el auge de las plataformas sin anuncios también va a limitar las oportunidades para la publicidad. Mientras tanto, los proveedores de contenidos para TV de todo tipo, tendrán que mirar con lupa las demandas y gustos de sus clientes para mantener su interés.